jueves, 8 de octubre de 2020

La historia de San Martín y las bandas de música | Por Prof. Fabián Agostinii

 

Nuestro Libertador fue un amante de la música y gran ejecutante de la guitarra. En sus ejércitos propició la formación de bandas militares que acompañaron y templaron el espíritu de sus soldados en instancias previas a la batalla.

Entre los aspectos poco conocidos de nuestro gran héroe el Gral San Martín se encuentra su gusto y afición por el dibujo y la música. Según Alfredo Villegas su especial predisposición por el dibujo, que practicó a lo largo de su existencia, le habría permitido sostenerse y adquirir buena cantidad de libros mientras se hallaba en Cádiz, antes de regresar a su tierra.

Su madre lo hizo estudiar guitarra, afición que conservó siempre y que lo llevó durante su permanencia en Francia, a tomar leccio­nes con el gran compositor español Fernan­do Sor, a quien conoció en el palacio de su futuro amigo Alejandro Aguado. Sor era un compositor destacado, su obra “Es­tudios”, es la base de la formación de todo guita­rrista aún en la actualidad y cuyos mé­ritos le valie­ron el apodo de “Beetho­ven de la guitarra”.

Fue autor, de dos sinfonías, un concierto para violín y orquesta, varias óperas (“Telé­maco en la isla de Calipso”) y ballets. Cabe destacar que estos compositores de impor­tancia, en general no aceptaban a cualquier alumno, por lo cual, las dotes musicales del Libertador deben de haber sido notables.

Entre los diversos ins­trumentos, San Martín prefirió la guitarra. El coronel Félix de Olazá­bal cuenta en sus me­morias que "después de elaborar un plan de combate, trazando mapas y otros elemen­tos necesarios, pedía la guitarra a su asistente y así tonificaba su espíritu en la intimidad de su alma".

EL EJÉRCITO DE LOS ANDES

Cuando San Martín forma el ejército de los Andes cuidó hasta el más mínimo detalle, tanto de los asuntos políticos y las estrate­gias militares como del abrigo y la comida de la tropa. Siguiendo esa tónica no escapa a nuestro héroe el efecto que la música causa en las personas y el importante incentivo que ejercen los acordes de las bandas militares en el “espíritu de los hom­bres”. Así el Ejército de los Andes contó con dos bandas más o menos completas, en los batallones nº 8 y 11 de Los Andes.

LA BANDA DE LOS NEGROS

En 1810 don Rafael Vargas, un acaudalado hacendado de Mendoza, mandó a Buenos Aires a 16 de sus esclavos a estudiar músi­ca con el destacado compositor Víctor de la Prada, que ese año abrió en la Capital una escuela de música. Aquellos 16 negros, provistos de uniformes e instrumen­tos, animaban las fiestas y reuniones privadas de su amo, así como algunas festividades públicas. Vargas donó al Ejército de los Andes la banda com­pleta, con vestuarios e instrumentos. Los esclavos incorporados ganaban su libertad.

LAS BANDAS DEL EJÉRCITO DE LOS ANDES

Las bandas acompañaron al Ejército en el paso de los Andes y desde la cuesta del Valle Hermoso, a la vista del territorio chileno, fueron las ejecutantes de nuestro Himno Nacional, que resonó en Chile como anuncio de su libertad.

El 22 de julio de 1817, San Martín y O’Higgins fundaron en Santiago una Aca­demia de Música, dirigida por el teniente Antonio Martínez, que contó en un principio con 50 alumnos, provista con instrumentos traídos de Londres y Estados Unidos.

SAN MARTÍN Y O'HIGGINS FUNDARON EN SANTIAGO UNA ACADEMIA DE MÚSICA, DIRIGIDA POR EL TENIENTE ANTONIO MARTÍNEZ, QUE CONTÓ EN UN PRINCIPIO CON 50 ALUMNOS, PROVISTA CON INSTRUMENTOS TRAÍDOS DE LONDRES Y ESTADOS UNIDOS.

EL REPERTORIO

El repertorio de las bandas del Ejército de los Andes incluía danzas populares como la Sajuriana, el Cielito y el Cuando y también valses. Entre 1810 y 1818 se habían compuesto numerosas marchas en Buenos Aires, en su mayoría debidas a la pluma de Ambrosio Morante y Blas Pa­rera.

EL CAMBIO DE GUARDIA DE LA BAN­DERA DE LOS ANDES

En 1992, la legisla­tura de la provincia aprobó la ley 5877 declarando de “interés provincial el acer­vo histórico y cultural del regimiento N° 11 “General Las Heras “. Un año después se recreó la histórica Banda Talcahuano y una sección con los uniformes y arma­mentos de época. Desde ese momento y en forma ininterrumpida, “Los Leones In­vencibles de Las Heras”, tal como se cono­ce al Regimiento, mantienen la custodia de la Bandera de Los Andes.

El tercer jueves de cada mes, con una importante presencia de público ubicado frente a las escalinatas de la Casa de Go­bierno, se realiza el cambio de guardia de la Bandera de la gloriosa enseña.

Desde 2012, esta ceremonia militar está a cargo del Memorial de la Bandera. Los soldados lucen uniformes históricos y portan armas de la época, similares a las que utilizaron los soldados del Ejército de los Andes.

Al comenzar el acto, el gobernador saluda a la Guardia de Honor del Regimiento de Montaña 11 “Gral. Las Heras” y da inicio a la Ceremonia del Cambio de Guardia y Demostración de Fuego del Regimiento.

El público, alumnos, docentes y demás visitantes, participa activamente de la in­terpretación de las marchas tradicionales y festeja especialmente las coreografías de gato, cueca y malambo a cargo de los efectivos militares.

La Banda Talcahuano desarrolla “el Ca­rrousell” interpretando conocidas mar­chas y temas populares culminando con un desfile militar que engalana el evento. Luego los presentes visitan el Memorial.

Es un acto protocolar muy importante en homenaje a la figura de San Martín y al símbolo máximo de la emancipación ame­ricana: la bandera del ejército de Los An­des. Es un evento que por despliegue y por historia, se puede considerar como uno de los cambios de guardia mejor posicionados a nivel mundial.

viernes, 24 de julio de 2020

La música ayuda a establecer vínculos entre padres e hijos


Los primeros tres años de la vida de un niño son un período muy especial durante el cual los padres y los bebés pueden hacer una música hermosa juntos, y pueden usar esta música para construir poderosas conexiones entre sí. El gozo mutuo experimentado por padres e hijos mientras comparten momentos musicales fortalece sus vínculos. Ese vínculo será el modelo para las relaciones cercanas del niño durante toda su vida. Establecer esos lazos con su bebé de manera musical simplemente se da como algo natural. En todo el mundo, cuando los padres les hablan a sus pequeños, ajustan sus voces para hacerlas más líricas, más rítmicas… en resumen, más musicales. Cuando su bebé responde se produce una especie de dúo, reforzando el amor y la confianza que ustedes comparten.

La música es también una manera única y poderosa para que los niños creen vínculos con sus raíces. Una canción espiritual Afro-Americana, una canción de cuna Yídish o Irlandesa, una canción folklórica Mexicana,todas introducen a su bebé a la herencia familiar en una manera que va más allá de las palabras o las fotografías.Y conectarse con sus raíces es otra forma de lograr que un niño se sienta a salvo y más seguro.

Qué debe esperar

0 a 9 meses:

● Muy pronto después del nacimiento, un bebé puede identificar la voz de su mamá entre otras voces y luego, muy poco tiempo después, la de su papá. La expectativa por oír las voces de sus padres es una señal de la conexión con los padres y de su confianza en ellos.

● Los bebés buscan activamente el sonido de voces humanas, especialmente cuando son más silenciosas, de tonos elevados, y rítmicas.

● Los bebés atraen la atención de sus padres imitando sus sonidos.

● Los bebés responden a la música de muchas maneras, tales como a través del establecimiento de contacto visual cuando usted le canta, moviendo sus brazos y piernas, o volteando su cabeza hacia otro lado cuando necesitan un descanso.

9 a 18 meses:

● A los niños les encanta compartir la música con otros. Ellos usan los sonidos, movimientos y expresiones faciales para interactuar.

● Una canción conocida le ayudará al bebé a sentirse a salvo y seguro en un ambiente que desconoce. En cierto sentido, las canciones se vuelven tan importantes y poderosas como el osito de peluche o la frazada que adoran.

● La música juega un papel muy importante en el establecimiento de rutinas. Cantarle la misma canción todas las noches a la hora de irse a dormir se convierte en parte de la transición entre estar despierto y dormir.

18 a 36 meses:

● A los niños de esta edad les encanta inventar canciones por sí solos y junto con otros.

● Los niños a menudo se cantan a sí mismos para reconfortarse. Usted puede oírlos cantando una canción de cuna, por ejemplo, después de que usted les ha dado el besito de las buenas noches. Esa es su manera de mantenerlos a ustedes a su lado.

● Los niños de esta edad les pedirán que les canten sus canciones favoritas una y otra vez, de la misma forma en que quieren que les lean sus libros favoritos muchas veces.


Lo que usted puede hacer:

● Ante todo, ¡cántele y tararéele a su bebé! Los estudios demuestran que los bebés prefieren las voces de sus madres y padres por encima de cualquier otra voz. No importa cómo crea usted que suena, su bebé será su público más expectante y adorable.
● A los bebés les gusta ver a la gente moviéndose al ritmo de la música.Actúe las canciones que usted le canta con sus manos y con movimientos corporales. Por ejemplo, cuando le cante “Tortitas de manteca”, use sus manos para mostrarle cómo hacer las tortitas. A medida que su bebé va creciendo, ensaye con otras canciones tales como “Pimpón”.
● Cántele una canción de cuna especial a su bebé antes de que se duerma, quizás alguna que usted recuerde de su infancia. El bebé aprenderá a relacionar esta canción de cuna con la hora de dormir. Esta es también una forma de compartir las historias, ritmos y melodías de generación en generación.
● Baile con su hijo.Toque algunos objetos musicales —hasta un sonajero— y baile llevando el ritmo.
● Si su hijo ve videos musicales, mírelos con él y únase a la actividad -cantando y bailando. Usted también puede usar los videos para ayudarle a hacer transiciones. Por ejemplo, dígale que usted se irá a trabajar tan pronto se acabe la canción del trencito.

( ECOS DEL SONIDO )